La inseguridad es algo que afecta a muchas personas y muchas veces va acompañada de baja autoestima, timidez y ansiedad que afectan e interfieren a la vida diaria. Por eso, es importante conocer qué es la inseguridad, cómo se manifiesta, qué consecuencias puede tener en la vida diaria y qué estrategias podemos seguir para dejar de serlo.


¿Qué es ser una persona insegura y como se manifiesta la inseguridad?

La inseguridad personal, como ya tratamos en un artículo dedicado exclusivamente a ella, es una reacción emocional que aparece, sobre todo, en situaciones sociales o en momentos en los que tenemos que tomar una decisión o afrontar un problema. También es conocida como falta de confianza en uno mismo.

Se desencadena cuando no nos vemos capaces de hacer algo o nos sentimos vulnerables o inestables. Esto, como veremos en el siguiente apartado, puede afectar a nuestra autoestima haciendo que disminuya.

Los síntomas o manifestaciones de la inseguridad suelen ser los siguientes:

  • Dificultad para la toma de decisiones
  • Dudas ante situaciones o aspectos de importancia
  • Poner por delante las opiniones de los demás
  • Tener un estilo comunicacional pasivo o agresivo
  • Problemas para recibir críticas, aunque estas sean formuladas en tono constructivo
  • Envidia de otras personas que consideran “superiores”
  • Sentimiento de vulnerabilidad
  • Timidez en situaciones sociales

Además, en algunas ocasiones, también puede ir acompañada de paranoia que se produce cuando tenemos el pensamiento irracional de que el resto de personas se quieren burlar de nosotros o que hablan mal a nuestras espaldas.

Esta inseguridad puede ser causada por diferentes factores: baja autoestima, alta autoexigencia, perfeccionismo, traumas pasados o haberse criado en ambientes exigentes.


Problemas que acarrea ser una persona insegura


Todo lo anterior, como te podrás imaginar, tiene graves consecuencias en la vida diaria de las personas que la sufren pudiendo llegar a interferir gravemente en ella. Algunos de los problemas más frecuentes son: 

Problemas sociales.

Uno de los ámbitos más afectado suele ser el social porque estas personas suelen comportarse de manera pasiva o agresiva. Por un lado, las personas que toman una actitud pasiva pueden desarrollar una fobia social. Por otro lado, también pueden comportarse de manera agresiva mediante la arrogancia o el narcisismo. En cualquiera de los dos casos las relaciones sociales de estas personas suelen ser pocas e insatisfactorias.


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Problema de toma de decisiones.

En muchas ocasiones, estas personas evitan tomar decisiones porque sienten que no están preparadas para ello. En consecuencia, no se suelen comprometer o afrontar los problemas que les van surgiendo en el día a día. Por ello, a veces dependen de otras personas que validen sus decisiones derivando en dependencia emocional.

Problemas de autoestima.

Muchas veces ponen por delante las opiniones de los demás porque piensan que son más válidas que las suyas propias. Asimismo, en el caso de que una persona les haga una crítica presentan dificultad para gestionarla creyendo que no son lo suficientemente buenos. Todo esto hace que la autoestima descienda.

Teniendo en cuenta lo anterior, también puede surgir ansiedad, depresión u otros problemas emocionales.


Estrategias a seguir para dejar de ser una persona insegura

Si crees que tienes un problema de inseguridad personal te recomendamos que realices las siguientes estrategias para superarla:

Haz una lista de todas tus cualidades positivas.

El autoconocimiento es muy importante. No te centres solo en lo negativo, todos tenemos aspectos positivos. Por eso, es interesante que intentes hacer una lista con algunos de ellos o pensar en las cosas positivas que has hecho durante el día. Reflexiona sobre qué se te da bien en la vida, seguro que puedes encontrar varias cosas.

No te compares con los demás.

Las comparaciones son odiosas y causan mucho daño. Piensa que eres una persona única y que no necesitas compararte con los demás. Como hemos comentado, todos tenemos cosas buenas y malas.

Ten en cuenta que tu opinión es igual de valiosa que la del resto.

No tengas miedo a expresar tus opiniones. Piensa que son igual de válidas que el resto y que todo el mundo tiene libertad de expresión.

Mejora tu autoestima.

A veces la inseguridad surge por una baja autoestima. Por eso, es importante que hagas alguna tarea para mejorarla. Entre otras cosas, te recomendamos que tengas un auto diálogo positivo. Es decir, que tengas cuidado con cómo te hablas.

Revisa si eres muy exigente contigo mismo.

La alta autoexigencia, muchas veces, nos puede llevar a ser inseguros. Pretender hacer muchas cosas a la vez o ser perfecto en todo puede conllevar un desgaste emocional.

Acepta los errores y aumenta la tolerancia a la frustración.

Todos cometemos errores, tenlo en cuenta. Como acabamos de decir, no podemos pretender ser perfectos en todo y todos nos equivocamos en algún momento.

Desarrolla tus habilidades sociales.

Las personas inseguras pueden tomar una actitud pasiva o agresiva. Por ello, es recomendable que entrenes tu asertividad.

Desarrolla las habilidades de resolución y afrontamiento de problemas.

Quizás no sepas como afrontar la toma de decisiones y los problemas. Te recomendamos que te entrenes en ello.

Además, también puedes practicar técnicas de relajación y respiración para paliar la ansiedad que puede surgir durante el proceso de cambio.

Cómo te puede ayudar la terapia para dejar de ser una persona insegura


En el caso de que el problema persista y no puedas ponerle solución tú solo, te recomendamos que acudas a terapia. En PsicoGlobal, pioneros en terapia online, diseñaremos un programa terapéutico centrado y adaptado a tus necesidades.

Entre otras, utilizaremos algunas de las siguientes técnicas: psicoeducación, reestructuración cognitiva, técnicas para reducir la ansiedad, habilidades sociales, técnicas para superar la dificultad para la toma de decisiones, role-playing, etc.

La terapia para dejar de ser una persona insegura te ayudará a mejorar diferentes ámbitos de tu vida: personal, social, laboral, familiar, etc.

Conclusiones

La inseguridad personal o la falta de confianza en uno mismo puede tener graves consecuencias para las personas que la padecen como, por ejemplo, la ansiedad, baja autoestima o problemas sociales.

Por eso, es importante que analices tu situación y que te pongas en manos de un profesional de la salud mental si crees que no puedes ponerle fin por ti mismo.