TRATAMIENTO DE LOS TRASTORNOS ALIMENTICIOS
El tratamiento para los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) está dirigido a intervenir en las conductas, pensamientos y emociones disfuncionales, al ser estas las áreas que se ven afectadas en los trastornos de la alimentación.
Durante la terapia trabajamos sobre los aspectos psicológicos y emocionales, como la obsesión por el peso, la imagen corporal, la insatisfacción con la figura y el propio cuerpo.
También se abordan los comportamientos disfuncionales relacionados con la comida y el patrón de ingesta y los trastornos asociados que en general están presentes, como pueden ser la ansiedad, trastornos del estado del ánimo, déficit de habilidades sociales, baja autoestima, etc.
| Duración |  1 hora |
50% descuento en 1ª sesión |
55€
27.5€
|
Terapia para los trastornos de la alimentación
Para desarrollar una terapia eficaz, lo primero que hacemos es una evaluación del caso.
Por medio de una entrevista diagnóstica analizamos cuáles son las manifestaciones y síntomas del trastorno de alimentación, cuál ha sido el curso del trastorno (desde cuando se padece, como ha ido evolucionando a lo largo del tiempo...), cuáles son los factores que detonan la conducta y cuáles son los que la mantienen.
También evaluamos otras áreas, como pueden ser el área social, profesional, familiar, la autoestima y factores de personalidad, para así, determinar que papel juegan, es decir, como intervienen y que impacto tienen en el trastorno.
Una vez recopilada toda la información, desarrollamos un diseño de terapia con unos objetivos terapéuticos que vamos a conseguir a través del proceso de terapia.
Objetivos de la terapia del trastorno alimenticio
Los objetivos de la terapia para los TCA pueden dividirse en: primarios, secundarios y finales.
Objetivos primarios
Relación terapéutica con el psicólogo
Establecer esta relación es la base para el trabajo en equipo que se desarrolla a lo largo de la terapia.
Desarrollar la motivación al tratamiento
En muchas ocasiones, los pacientes han intentado diferentes soluciones que han fracasado y se encuentran desmotivados, por lo que recuperar la motivación es una pieza clave de la terapia.
Tomar conciencia de la enfermedad
El objetivo es que la persona acepte el trastorno y que entienda como se relaciona y afecta la enfermedad a diferentes áreas de su vida.
Normalizar los patrones de alimentación
Gracias a diferentes estrategias psicológicas, sustituimos los patrones disfuncionales de alimentación por otros que permitan una relación más saludable con la comida.
Modificar pensamientos y creencias distorsionadas sobre la comida y los patrones de alimentación
Trabajamos desde la terapia cognitivo-conductual para detectar estos pensamientos y creencias, para que la persona aprenda a construir pensamientos más saludables y racionales.
Disminuir las alteraciones de la imagen corporal
Aquí, la terapia se centra en la construcción de una imagen corporal más positiva y ajustada a la realidad.
Eliminación de conductas compensatorias
Buscamos que la persona adquiera el control para eliminar las conductas compensatorias que forman parte del trastorno, como los vómitos, el uso de diuréticos o el ejercicio excesivo.
Objetivos secundarios
Mejorar las habilidades y relaciones sociales
Buscamos que la persona mejore sus relaciones sociales, mediante la recuperación o establecimiento de las habilidades sociales que en muchas ocasiones se pierden en el trastorno.
Mejorar el estado de ánimo
Los trastornos de la alimentación alteran el estado de ánimo, por tanto, se trabaja en su mejora a través de diferentes estrategias, tanto conductuales como cognitivas.
Gestión emocional
Las emociones y los TCA tienen una estrecha relación, por esto, en la terapia nos centramos en que la persona desarrolle estrategias para gestionar sus emociones de una forma saludable y no a través de la comida.
Aumento de autoestima
Los trastornos de alimentación están relacionados con una alteración de la autoestima, por lo que es indispensable orientar la terapia al aumento de la autoestima, la autoeficacia y el autorrefuerzo.
Desarrollo de estrategias frente al estrés
Trabajamos con la persona para que detecte las fuentes de estrés que están presentes y que desarrolle herramientas para gestionarlo de una forma funcional y no a través de su conducta de alimentación.
Modulación de características personales
En la terapia psicológica trabajamos niveles de perfeccionismo, autoexigencia, autocrítica, pues en general, son patrones de personalidad involucrados en el desarrollo y mantenimiento de los TCA.
Objetivos finales
Prevenir recaídas
Establecemos estrategias para enfrentar las recaídas, como pueden ser dietas, situaciones de estrés, inestabilidad en algún área vital, mediante el análisis y prevención de situaciones.
Mantenimiento de mejoras
Buscamos la estabilización y la interiorización de todas las estrategias, aprendidas durante la terapia, que permiten a la persona mantener una relación saludable con la comida.
EMPIEZA LA TERAPIA CON NUESTROS PSICÓLOGOS ESPECIALISTAS EN TRASTORNOS ALIMENTICIOS
Ver Tarifas Empezar TerapiaTCA y familia
En algunos casos será necesario involucrar a la familia en el tratamiento de la persona con TCA.
La familia puede ayudar a su ser querido a que sea consciente de la enfermedad que padece, así como de la necesidad de buscar ayuda profesional, motivándole a iniciar un proceso terapéutico.
En estos casos, es importante que la familia adopte un papel activo en la terapia, participando en los cambios de conducta alimentaria que la persona irá implementando durante el proceso.
También, la participación en la terapia, permitirá a los familiares gestionar aspectos que se generan en la convivencia con una persona con TCA, como son los conflictos, las frustraciones, la culpa o las dinámicas familiares negativas.
Objetivos de la terapia con las familias en los TCA
- Psicoeducación sobre el trastorno de la conducta alimentaria, sus síntomas y manifestaciones, los trastornos emocionales asociados y aquellos factores que mantienen el trastorno.
- Implicación de la familia en la terapia, a fin de establecer una estrategia unificada entre familia, paciente y psicólogo.
- Normalización de las dinámicas familiares y mejora de las mismas. También se trabaja en la mejora de los vínculos familiares.
Tipos de trastornos alimenticios
