El miedo a hablar en público puede ser, en muchos casos, incapacitante. En otras palabras, puede afectarnos en nuestro día a día interfiriendo en las actividades de la vida cotidiana y limitándonos. Este fenómeno también puede ser conocido como glosofobia.

Por ello, en el artículo de hoy vamos a hablar sobre qué es el miedo a hablar en público, cuando se puede considerar un problema, cuáles son sus síntomas, qué factores lo modulan y qué podemos hacer para gestionarlo.

También puedes verlo en video:



¡Empezamos!


¿Qué es el miedo a hablar en público?

La fobia a hablar en público, también conocida como glosofobia, ocurre cuando una persona tiene un temor intenso y no racional a hablar delante de otras personas. En el caso de que sea incapacitante, es decir, que afecte a la vida diaria de la persona, puede considerarse que se trata de una fobia social.

En muchas ocasiones se trata de un trastorno de ansiedad y en muchos casos ocurre dentro del trastorno denominado fobia social o del pánico escénico.


¿Cuáles son los síntomas que padece la persona?

Como hemos comentado, la glosofobia o miedo a hablar en público puede aparecer de manera aislada. En otras palabras, aunque es común que se produzca en el transcurso de la ansiedad o fobia social, no tiene por qué producirse en estos trastornos.

Recordemos que el trastorno de ansiedad social o fobia social ocurre cuando se da una ansiedad intensa a exponerse a situaciones sociales en las que existe la posibilidad de ser juzgado por otras personas. Estas situaciones pueden ser: comer, beber, hablar, reunirse con otros, etc.

Por lo que podemos concluir que:

Las personas con glosofobia también estarían siendo, en la mayoría de los casos, víctimas del trastorno de ansiedad social, pero que no todas las personas con ansiedad social tendrían glosofobia.

Quizás alguna vez has escuchado los términos “pánico escénico” o “miedo escénico”. Están relacionados con la glosofobia, esto ocurriría cuando la persona siente miedo ante la posibilidad de tener que exponerse ante otras personas y ser el centro de atención. En ocasiones podría estar relacionado con la glosofobia, pero no siempre. Esto es así porque no todas las personas que se exponen ante un público hablan, es decir, algunas tocan instrumentos, otras bailan, actúan, etc.

Los síntomas que aparecerían ante el hecho de hablar en público serían los mismos que en cualquier otro trastorno de ansiedad: aumento de la tasa cardíaca, sudores, temblores, sensación de ahogo, dolor en el pecho, problemas intestinales, desrealización o despersonalización, miedo a perder el control, pensamientos irracionales y obsesivos, etc.

Factores internos y externos que modulan el miedo


Es importante tener en cuenta que hay diferentes factores, tanto internos como externos, que modulan el miedo y que contribuyen de una manera u otra a la aparición y el mantenimiento de este. Los factores más comunes son los siguientes:

Factores internos.

Son aquellos que están asociados con nosotros mismos. Es decir, aquellos factores que pueden ser modificados por nosotros mismos.

Alto perfeccionismo.

Cuanto mayor sea el perfeccionismo mayor será también la probabilidad de tener miedo a hablar en público. Pensar que tenemos que llegar a alcanzar la perfección o que todo lo tenemos que hacer de manera impecable puede acarrearnos este problema.

Autoexigencia.

Relacionado con lo anterior, cuanta mayor sea la exigencia hacia nosotros mismos, mayor probabilidad también de tener glosofobia. Creer que se debe tener éxito y que si no se tiene las cosas serán horribles es el origen de ello.

Experiencia previa.

Por lo general, cuantas más veces hayamos hecho algo similar, mayor probabilidad tendremos de hacerlo sin miedo. Aun así, si hemos tenido alguna mala experiencia previa también podría ser decisiva.

Grado de control sobre la exposición.

Si podemos controlar ciertos factores como, por ejemplo: la iluminación, la cantidad de público, etc. nos sentiremos más cómodos porque podremos adaptar la situación a nuestras necesidades.

Baja autoestima e inseguridad.

La baja autoestima y la inseguridad también pueden hacer que desarrollemos este miedo. Al fin y al cabo, si no nos vemos seguros de algo podemos empezar a temerlo o evitarlo.

 microfono 

Factores externos

Se trata de todos aquellos factores que no podemos modificar y que no dependen de nosotros. Como, por ejemplo, los siguientes:

  • Cantidad de público.
  • Características del público.
  • Características del lugar.


Estrategias para gestionarlo

Ahora bien, para poder superar el miedo o que no se convierta en fobia social es recomendable seguir una serie de estrategias para poder gestionarlo. A continuación, mencionamos algunas de las más importantes:

Rebajar expectativas y perfeccionismo.

Como hemos comentado, unas altas expectativas sobre la situación pueden llevarnos a tener miedo a hablar en público. Por ello, es importante que analices la situación y que pienses que no se debe tener éxito y ser competente en absolutamente todo lo que hacemos. Si no que tenemos que hacerlo lo mejor posible sin la necesidad de tener que llegar a la perfección patológica.

Controla el tema.

Es importante que te encuentres seguro con el tema que tienes que exponer. Por ello, es recomendable que leas sobre ello, que te prepares y que recopiles toda la información necesaria.

Ensayos.

Aunque parezca que no, es muy importante que puedas ensayar el tema. Puedes exponerte de manera gradual, es decir, primero hablar delante del espejo, luego hacerlo delante de gente de confianza para ir aumentando el público progresivamente. Además, si existe la posibilidad de que te puedan hacer preguntas, es importante que hagas un simulacro de qué posibles preguntas te podrían formular.

Auto instrucciones.

Darse a uno mismo mensajes o instrucciones positivas, también es muy eficaz. Podrías decirte cosas como “respira, tranquilo, tú puedes, todo va a ir bien, recuerda mirar a la gente a los ojos, etc.”.

Relajación.

Antes de la exposición también puedes practicar técnicas de respiración y relajación con el objetivo de detener la activación propia de la ansiedad.

Cuestiona tus pensamientos.

Durante el proceso, probablemente, aparezcan una serie de pensamientos irracionales como, por ejemplo: “no vas a poder con ello”, “se van a reír de ti” o “seguro que vas a hacer el ridículo”. Intenta rebatir y cuestionar estos pensamientos para que no te hagan tanto daño.


El recurso de la terapia cognitivo-conductual para superar el miedo

La Terapia Cognitivo Conductual (TCC) según diversas investigaciones como la de Baeza (2007) ha demostrado ser una de las más eficaces en el tratamiento de la ansiedad o fobia social. Las técnicas que se utilizan en esta terapia para hacer frente a la ansiedad social suelen ser las siguientes: exposición, reestructuración cognitiva, relajación, etc.

Además, diferentes guías clínicas como la de la Asociación Americana de Psiquiatría también determinan que es el tipo de terapia psicológica más eficaz en el tratamiento de este trastorno.

Por ello, en el caso de que pienses que estás siendo víctima de ello y que tú solo no puedes hacerle frente a través de las técnicas que hemos mostrado, te recomendamos que hagas terapia online con el objetivo de poder beneficiarte de una terapia psicológica adaptada a tus necesidades.

En resumen, la glosofobia o el miedo a hablar en público puede convertirse en ansiedad o fobia social. En algunos casos también está relacionado con el pánico o miedo escénico. Los síntomas de ansiedad son los propios de cualquier fobia específica y está modulado por diferentes factores internos y externos. Se puede superar a través del uso de diferentes estrategias y está relacionado con: baja autoestima, perfeccionismo, altas auto expectativas, etc.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR:

Referencias bibliográficas